(Damasco) En hechos sin precedentes en el Medio Oriente y que sobrepasan algunos de los peores momentos de la guerra fría, Estados Unidos intensifica la presencia en Siria, y en los campos de petróleo y gas del norte del país. Las denuncias al respecto, continuamente expuestas por Damasco y Moscú en foros internacionales, tienen total falta de eco en los medios de comunicación occidentales o de algunos de la región, aún cuando tales acciones violan el derecho Internacional y las denominadas líneas rojas de una guerra no declarada.