Extendida la hoja de ruta para el acuerdo de paz en Sudán del Sur
Desde 2018, el acuerdo renovado entre las partes que desempeñaron un papel clave en la prolongada guerra civil de Sudán del Sur ha brindado un marco para trabajar en pos de la paz pese al continuo estallido de violencia intracomunitaria. Aunque los plazos de este acuerdo finalizaron en febrero, las partes acordaron en agosto una hoja de ruta para extender el período de transición actual otros dos meses más.
El proceso de paz está monitoreado y auspiciado en el marco de la Misión de Asistencia de las Naciones Unidas en la República de Sudán del Sur, que se ha centrado en promover un proceso político inclusivo y un espacio cívico abierto para la construcción de un proceso electoral fuerte y competitivo. Las medidas se adentran en el terreno de lo político, pero también de la gestión. Se han producido acuerdos para romper el estancamiento parlamentario y también se ha colocado como una de las primeras prioridades completar la primera ronda de reclutamiento de las Fuerzas Armadas Conjuntas, cuyo presupuesto, integración y despliegue son fundamentales para permitir una transformación más amplia de la industria de la seguridad y apuntalar los logros ya conseguidos.
Todo esto es un contexto donde la violencia en la región perdura, marcada por un ciclo de robo de ganado, secuestros y asesinatos por venganza, así como los combates en el estado del Alto Nilo han dejado miles de ciudadanos desplazados. Los representantes de la Misión de Paz reiteran que su foco de acción debe estar centrado en la prevención a través de marcos políticos y otras áreas. La Misión sigue centrando su enfoque de trabajo en un doble pivote; por un lado canalizando recursos hacia el proceso político y, por otro lado, un despliegue proactivo en puntos calientes de violencia, extendiendo la presencia protectora a los civiles.