Tras los enfrentamientos que desde hace más de una semana tienen como escenario la capital ecuatoriana, la ciudad amaneció el domingo con escombros, restos de barricadas y basura quemada, pues sin importar el toque de queda y militarización decretados el sábado, miles de ciudadanos tomaron las calles de madrugada con un “cacerolazo” para rechazar la violencia y pedir la derogatoria del decreto 883 de Lenín Moreno y el FMI.
Ese decreto, entre otras cosas, elimina el subsidio de mil 300 millones de dólares al combustible, disminuye 20% del salario de los empleados públicos contratados por honorarios profesionales, mientras exonera de impuestos, por el orden de mil 400 millones de dólares, a los más pudientes.
Mientras continuaba la represión violenta contra los manifestantes, el Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas de Ecuador informó que hasta las 8:00 pm se levantaba el toque de queda en Quito, pero quedaría restringido el movimiento en zonas del norte de la ciudad.
Diálogo. La tarde del domingo inició el encuentro entre el Gobierno y la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conai), con la ONU y la iglesia como mediadores.
El encuentro inició con la intervención del presidente Moreno y tuvo como moderador a Arnaud Peral, representante de la ONU. Moreno, aseguró que nunca ha tratado con desprecio a los pueblos indígenas y espera “analizar y llegar a conclusiones que serán incluidas en el nuevo decreto”.
Responsabilizó de la violencia a los correístas “por ser un cáncer”, a los narcotraficantes que asegura se afectan por el decreto y a un “gobierno mercenario” que infiltró extranjeros en las manifestaciones. Agradeció que los indígenas “se desprendieran” de quienes generaron el caos. “Ustedes no son así”, dijo.
Jaime Vargas presidente de la Conai, agradeció el acompañamiento al pueblo de Quito y el apoyo en jornadas de resistencia.
Aseguró que el 883 es una medida que golpea a los estratos más pobres y los llevan a la miseria, no genera beneficio social, no tiene que ver con el plan de desarrollo, ni coherencia fiscal.
“Presidente, usted tiene ministros que no tienen voluntad política, vagos que no hacen nada por la patria”, dijo y aseguró que la intransigencia le hace mucho daño al país. “Somos millones los que le pedimos que apueste por la paz… derogue este decreto 883… hoy se ve y se siente clarito que la derecha está administrando el país”, sentenció.
Fuente: UltimasNoticias
Observatorio de Medios del Centro de Saberes Africanos, Americanos y Caribeños